jueves, 18 de septiembre de 2008

Entrevista a María de Juan

Esta mañana se publicó en Cinco Días una entrevista realizada a María. Esta dentro del segmento “Urbe” y está enmarcada en un capítulo dedicado a los centros comerciales…

Esta es la entrevista original:

- ¿Cuánto tiempo tardo en construirse Xanadú?
[MdJ] Dieciocho meses desde el movimiento de tierras Octubre 2001 hasta la inauguración en Mayo de 2003.

- ¿Cuáles son los elementos más representativos de la arquitectura de Xanadú que usted destacaría?
[MdJ] La estrategia base de diseño es la combinación de ocio y comercio, organizados en dos ambientes con carácter único pero bajo un mismo techo. En segundo lugar el tratamiento urbano del centro, que los arquitectos Chapman Taylor consiguieron mediante la presencia constante de luz natural y que proporciona las referencias temporales y climáticas que habitualmente percibimos en la calle. Este tratamiento urbano promueve por otra parte la variedad en el diseño de los locales que forman el centro.

- Actualmente ¿ha habido innovación en los materiales usados para la construcción de centros comerciales? ¿En Xanadú cuales fueron?
[MdJ] La innovación en los materiales es constante en estos días y los Centros Comerciales son una tipología idónea para probarlos, ya que el factor sorpresa y la novedad son fundamentales en la idea de entretenimiento. En Xanadú la principal innovación fue el techo translúcido de la zona de ocio, realizado con una cubierta de textil combinada con lucernarios de vidrio.

- ¿Se busca atraer al cliente mediante la arquitectura?
[MdJ] El principal objetivo de la arquitectura es no sólo atraer al público sino crear un “lugar”, por supuesto se busca impresionar con la arquitectura pero la novedad dura poco y lo que queda es el nivel de confort y la sensación que el cliente experimenta cuando está dentro del Centro. El objetivo es crear una atmósfera dinámica semejante a la de las plazas y lugares de encuentro urbanos.

- ¿Que buscan las nuevas construcciones para atraer a los clientes?
[MdJ] Los centros comerciales van más allá de la actividad de la compra, se han convertido en el sustituto de la plaza en la que convivían los ciudadanos. Se busca la misma variedad controlada que proporcionaban las plazas mayores, una sensación de seguridad, de espacio contenido que alberga muchas actividades y tiene capacidad de reinventarse a distintas horas del día, enfocándose a actividades comerciales o de ocio en función del horario o de las estaciones. Por eso las construcciones deben ser flexibles e incorporar elementos más propios del ambiente urbano.

- ¿Es la diferenciación la clave del éxito?
[MdJ] Inicialmente tal vez lo sea, con el tiempo creo que la buena gestión y la atención al cliente son la clave del éxito.

- Según se parecer, ¿cuál es el centro comercial que, actualmente, es más innovador en cuanto a arquitectura? ¿por qué?
[MdJ] En Madrid Islazul me parece un paso adelante en cuanto al carácter urbano al que me he referido antes. Han conseguido hacer una cubierta casi invisible, que acentúa mucho el ambiente de calle mayor o calle comercial, de lugar abierto, tiene además un diseño muy rico en cuanto a detalles y mucha actividad en la calle comercial.

- ¿Es igual de importante la decoración interna como la externa en los centros? ¿Por qué?
[MdJ] Absolutamente, de hecho el interior del centro tiene vocación de exterior, tiene que convertirse en el contexto de un gran número de actividades diversas, servir de marco y a la vez dotar de carácter al Centro. Es muy importante crear una atmósfera interesante, más allá del interés que generan los locales, las marcas, el propio centro debe ser interesante y provocar la sensación de entretenimiento, de espacio para hablar, sentir, ver, oir y tocar. En ocasiones las texturas y los acabados, o el comportamiento acústico de los materiales son tan importantes como sus cualidades visuales.

- ¿Normalmente, en cuantas zonas se divide un centro comercial?
[MdJ] Hay dos grandes zonas destinadas a comercio y ocio respectivamente que se separan por razones de horarios de uso y de sinergia, a su vez cada una de ellas suele tener distintos ambientes en función del carácter dominante de los locales que se instalen en cada zona. Por ejemplo en la zona de comercio se puede crear un rincón de la moda, o del hogar. Es muy similar a lo que ocurre en la ciudad, cuando una calle congrega determinado tipo de comercio, se me ocurre el ejemplo de Argensola en Madrid, en la que se han concentrado varias tiendas gourmet, o Fuencarral con su concentración de moda.

- ¿Con que elementos se está jugando actualmente para la elaboración de nuevos proyectos comerciales?
[MdJ] En arquitectura estamos centrándonos en potenciar la calidad de las zonas comunes, que han pasado de ser un pasillo climatizado como ocurría en los centros de los años ochenta y principios de los noventa a ser espacios interesantes en sí mismos, y que deben incorporar actividades. Para mí el reto está en romper la barrera exterior-interior y sobre todo en conseguir estimular la imaginación de los locales. hay que conseguir que los locales e los centros comerciales sean tan interesantes como los locales a pie de calle y huir de la consabida cristalera plana y aburrida.

- ¿Diría que la construcción de Xanadú y de La Maquinista han supuesto un punto de inflexión para la arquitectura de los centros? ¿por qué?

[MdJ] La Maquinista fue pionero a la hora de considerar la arquitectura como valor añadido a la actividad comercial. Xanadú supuso un punto de inflexión en la propuesta combinada de Ocio y Comercio y en el cuidado de la atmósfera interior del centro, en la adaptación de la arquitectura a las actividades que planteaba.

- ¿En la primera visita a un centro comercial que destaca para la fidelización del cliente?
[MdJ] Nuestro propósito es que la arquitectura contribuya a esa fidelización, que con independencia de la necesidad o el deseo de comprar , el centro sea un espacio sugerente y atractivo en el que disfrutar del ocio ya sea paseando, viendo una película, esquiando, tomando un helado, o por qué no yendo de compras. En una primera vista es fundamental que la experiencia agradable empiece desde la llegada, con un acceso cómodo, el aparcamiento fácil, en una zona que ya participe del carácter lúdico de las actividades y que el ambiente sea amplio, confortable y sobre todo enriquecedor desde un punto de vista sensorial.

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